El matrimonio no es algo que debes soportar,es algo que debes disfrutar
El matrimonio no es algo que debas soportar, es algo que debes disfrutar.
En la actualidad vemos como los matrimonios duran muy poco escasamente un año y llega el divorcio; pero lo mas triste es ver matrimonios destrozados cuando hay hijos de por medio.
La raíz de la separación no es lo que pasara en el futuro, sino desde el noviazgo se empiezan a cosinar los problemas del futuro. Esto sucede cuando la pareja tiene distintos valores, distinta visión, carácter distinto y un egoísmo profundo.
Los valores como amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio. (Gálatas 5:22-23 PDT) deben de estar en la agenda y en la practica de cada uno.
Cuando hablamos de distinta visión no nos referimos a la realización de cada uno, sino a la glorificación de Dios, existimos para glorificar a Dios. Ustedes no son iguales a los que no tienen fe en Cristo. Entonces no se junten con ellos. ¿Acaso hay algo en común entre la justicia y la injusticia? ¿Cómo puede estar la luz junto con la oscuridad? (2 Corintios 6:14 PDT)
El carácter es la manera en la que actuamos ante los problemas y ante la injusticia, el temperamento es simplemente la manera en la que nuestras emociones se manifiestan, recordando que estas se sujetan cuando hay un control propio que glorifica a Dios. Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio. (2 Timoteo 1:7 RVR1960)
Y el egoísmo profundo habla de un narcisismo de amarse a sí mismo, buscar la felicidad propia y extraer todo sin querer dar nada a cambio, el verdadero amor lo da todo y no espera nada a cambio, el verdadero amor busca la felicidad del otro sin esperar la propia felicidad, pero como es un principio del cielo, vendrá nuestra propia felicidad. Amarás a tu prójimo como a ti mismo. (S. Mateo 22:39 RVR1960)
El matrimonio es la base de la familia, así que debes disfrutar y no soportar.
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