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Mostrando entradas de noviembre, 2017

¿Estás del lado del bien o del mal?

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Muchas ocasiones las personas han querido estar del lado del mal ya que vemos que los narcotraficantes tienen enormes casas, tienen sueldos que a nosotros nos llevaría años obtenerlos y joyas que no cabrían en un joyero sino en un baúl. Estar del lado del mal pareciera lo mejor, ya que existe la frase “el que no transa no avanza” sin embargo esta manera de pensar nos pone tarde o temprano en “jaque mate”, nos lleva contra la pared, además que como personas honradas podemos llegar a tener los mejores lujos, las más grandes propiedades y ser millonarios. Nada es imposible; siguiendo con la pregunta: estar de lado del bien trae paz a una nación, trae bienestar para todos y prosperidad, no estoy en contra de la prosperidad legal, estoy en contra de una mentalidad que nada más ve por sí mismo y no extiende la mano. La prosperidad se recibe y con la otra mano se da, el bien trae progreso a una nación, hacer las cosas bien trae fuerza a una nación. Los problemas y las pruebas sol

El arrepentimiento es necesario cuando se cometen faltas

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En nuestros días la falta de arrepentimiento provoca rencor y odio en las personas, el orgullo no permite que las personas se arrepientan y el arrepentimiento es necesario para iniciar justicia para los agredidos.   El arrepentimiento no sólo es sentirse culpable sino pedir disculpas y aceptar un juicio por más difícil que sea la condena, sin embargo en algunas ocasiones la misericordia de Dios interviene y no permite que sea tan cruel. “No me expulses de tu presencia y no me quites tu Espíritu Santo.” Salmos 51:11 NTV decía David al haber pecado contra Dios.  El arrepentimiento no es llevar regalos al afectado pues no se trata de compra su misericordia y perdón, “Tú no deseas sacrificios; de lo contrario, te ofrecería uno. Tampoco quieres una ofrenda quemada.” Salmos 51:16 NTV , entonces cuando hay juicio hay justicia y eso trae paz para el pecador y para el afectado, es necesario entender que la justicia de Dios siempre llega. Para finalizar podemos decir que el a